Reseña de la II feria de la cerveza artesana de Fuente Álamo.

Con 10 cerveceras que presentaban un total de 41 cervezas diferentes, este fin de semana estuvimos en la feria de Fuente Álamo. Ubicada en el centro del pueblo, la plaza San Agustín, y con el aliciente añadido de los grupos de música que actuaban en directo allí nos dirigimos con la intención de probar buenas cervezas y de charlar con los cerveceros. Varios de ellos ya habían estado en Fuente Álamo el año pasado y, contentos con la organización y con el resultado de la misma, repitieron. Y no nos extraña, fue una pequeña gran  feria, no faltaron la música y la comida, y la gente de la asociación El Grito y en especial Pedro y Ana, hicieron que este evento fuera un éxito de público y de participación.

Debido a que estuvimos los dos días pudimos probar cervezas de todos los puestos e intercambiamos impresiones con algunos elaboradores. Muchas cervezas nuevas, algunas de ellas muy interesantes, pasamos a repasarlas.

Guimo´s trajo su primera cerveza, una lager tipo Munich muy correcta, maltosa y sabrosa. Hablamos con ellos, nos contaron que la presentaron en el verano 2.014. Tras superar varios problemas se han relanzado al mercado y poco a poco irán pensando en nuevas recetas, estaban muy contentos de estar en la feria.

Bizantina tiene dos cervezas una lager y una ale rojiza. Probamos su lager, una cerveza fresca, con suave sabor a frutos secos y un picor final muy rico como de nuez moscada. Nos gustó mucho esta cerveza, y como siempre fue un placer hablar con William y su esposa, una pareja de 10 que transmiten su respeto por la elaboración más exigente para presentar al cliente el mejor producto posible.

Tudmir llevaba tres cervezas, La Cantonal, Begastri y Ello. Probamos esta última, una ale con trigo y aromatizada con naranja. No nos gustó, estaba muy agria y no tenía carbonatación. 

Tierra de Frontera vinieron desde Jaen. Con sus atractivas etiquetas estos chicos nos sorprendieron por su simpatía y sencillez. Apuestan a tope por la imagen y la calidad de su producto en una tierra en la que han sido pioneros, bien por ellos. Probamos su pale ale, buena cerveza caramelosa con aroma a fruta madura y final amargo. Esperamos verles por aquí otra vez.

Exulans fue el descubrimiento personal del fin de semana. Estuvimos con ellos el viernes en la feria que había en Elche, y en Fuente Álamo los vimos los dos días, por lo que pudimos probar varias de las cervezas de su catálogo. Nos gustaron todas, pero hablaremos aquí de la WIPA El Grito que presentaban a la feria. Una gran birra de 70 IBUs que pasaban muy bien, seca, nada astringente y aroma herbáceo. Intentaremos visitarles en su fábrica de Novelda pronto.

Far West se presentaba con ocho cervezas. De ellas probamos dos, una IPA suave y la Predicador, una belga oscura. La primera era aromática, pero dejaba un sabor raro en boca, la segunda estaba algo ácida. Poco conseguidas las dos.

Cervezas Trinitaria vinieron de Torre Pacheco con dos cervezas. La Pajiza, una ale herbácea muy correcta, refrescante y poco amarga. También tenían una dry stout que nos gustó más, seca y torrefacta, con 4,5% APVB de graduación alcohólica, muy refrescante para el estilo. Hablamos un rato con los hermanos de Trinitaria, se nota que saben un montón de birra. Nos contaron que utilizan materias primas españolas, y se interesan por su procedencia para tratar de ofrecer un producto lo más local posible.

El Cantero llevó las grandes cervezas a las que nos tiene acostumbrados. Nos alegró mucho encontrarnos de nuevo con Ginés y Maria José y pudimos beber de barril lo último que les quedaba de su Whisky in the Jar que tanto nos gusta. Además de sus IPA y Saison que ya hemos comentado aquí, trajeron una cerveza nueva, Blanca de Azahar, una witt muy aromática y dulzona con un final seco. Otra vez vuelven a presentar una cerveza muy personal, que no se parece a ninguna que hubiéramos probado y que no puede dejar indiferente a nadie, con aromas a azahar y jazmín.

Yria vino cargada de IBUs y petroleo. No solo con cervezas suyas, también trajeron cervezas de las que distribuyen. En su stand se podía encontrar Guineu, Naparbier, North Coast o 3 Floyds, todo un lujo. De las suyas probamos una IPA citra mosaic, riquísima, muy tropical y fresca, pero con final seco y amargo y nada empalagosa. Una imperial brown cuyas notas de tofee maridaban muy bien con lascas de chocolate amargo que nos ofrecieron. También una muy buena imperial IPA, la Beerbol, con aroma a cítricos y resina, cuerpo ligero y un buen y largo final amargo. Unos chicos muy majos que trajeron los pepinos que todo el mundo iba buscando a partir de ciertas horas de la noche.

Yakka también trajo todo su repertorio de cervezas que ya hemos repasado en este blog. Pudimos degustar varias de barril y todas ellas en botella. Poco más tenemos que decir de una de nuestras cerveceras favoritas. Su puesto siempre estuvo animado y a los asistentes les gustaron las birras elaboradas por Siul Herrero.

La Garrofa stout es la cerveza elaborada en exclusiva para la feria en colaboración entre El Cantero y Yakka. Se pudo degustar de barril en ambos puestos y comprar en botellas de 33 o 50 cl. en el local de la asociación organizadora. Las botellas quedaron muy chulas gracias al diseño ganador del concurso organizado para la feria. En el local de El Grito, además pudimos ver una exposición con todos los diseños participantes. La organización nos pidió unas notas de cata de la cerveza para incluirlas en una etiqueta atada al cuello de la botella. Muy contentos de que nos lo pidieran lo hicimos con mucho gusto. Aquí podeis leer la cata de la cerveza que publicamos hace unos días.

Pedro y Ana con el lote de cervezas.

Con la compra del vaso conmemorativo de la feria se hacía entrega de una papeleta con la que se podía votar a la cerveza que más gustara y entrar así en el sorteo de un lote de cervezas artesanas, y fue Yakka quien ganó el premio del público.
El domingo se realizó una cata con 10 cervezas, una por cada cervecera, con el objetivo de entregar un premio a la mejor cerveza de las presentes en la feria. Desde la organización nos pidieron participar en esta cata como miembro del jurado que otorgaba el premio, y por supuesto aceptamos encantados. Hicimos una cata a ciegas de las diez cervezas presentadas, tras una primera ronda nos quedamos con dos de ellas que volvimos a catar. Tras la deliberación, y no sin dificultades, elegimos una cerveza que resultó ser Beyakka de Yakka, un cervezón del que ya os hablamos aquí. La cervecera nómada se llevaba pues los dos premios entregados en la feria.

Siul Herrero con los premios del público y el jurado.

Cervezas aparte, el ambiente que vivimos todo el fin de semana fue genial. Los Coronas atrajeron a mucha gente y el sábado por la noche la feria estuvo hasta arriba. Siguió la música hasta las 3:00, e incluso sabemos que algún puesto estuvo abierto hasta las 5 de la mañana. Nos encontramos con muchos amigos, entre ellos, los chicos de Gastrobeer, que montaron un puesto de perritos y a los que se pudo ver durante todo el fin de semana disfrutando de esta fiesta de la cerveza. También con cerveceros que no tenían stand y vinieron a disfrutar de la feria y en general con aficionados de toda la región que vinieron a pasarlo bien y a beber buena birra. Esperamos repetir el año que viene, ¡salud!